Moscú efectuó este martes con éxito el lanzamiento de prueba de un misil balístico intercontinental RS-24 (Yars), que fue lanzado desde el cosmódromo de Plesestsk (800 kilómetros al norte de Moscú), informó el Ministerio ruso de Defensa en un comunciado citado por EFE.
El proyectil recorrió miles de kilómetros e impactó en su objetivo en la península de Kamchatka, en el extremo opuesto del país.
"El objetivo principal del lanzamiento es comprobar la fiabilidad de una partida de misiles de esta misma clase. Los bloques experimentales llegaron a la zona prevista en el polígono Kura en la península de Kamchatka. Los objetivos marcados se han conseguido plenamente", señala el comunicado del ministerio.
Las primeras pruebas de los RS-24 se realizaron hace ya una década y el misil ruso ya ha sustituido en los arsenales nucleares rusos a sus predecesores RS-18 (SS-19, Stilleto, según la clasificación de la OTAN) y los RS-20, (SS-18).
Moscú sostiene que el misil balístico RS-24, capaz de transportar tres o más ojivas nucleares, puede superar sin problemas el escudo antimisiles estadounidense.
Los misiles intercontinentales, los submarinos nucleares y la aviación estratégica conforman la tríada nuclear rusa en su programa de rearme, que contempla el gasto de unos 700.000 millones de dólares en armamento hasta 2020.
El ensayo ordenado por Moscú sucede en medio de una tensión entre Rusia y Occidente por la crisis de Ucrania, sin precedentes desde la caída de la Unión Soviética, pero también en un contexto del conflicto en la península de Corea, a raíz de los constantes ensayos armamentísticos realizados por Pyongyang, recuerda la agencia de noticias Télam.
Este lunes, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas endureció de manera unánime las sanciones contra Corea del Norte por la realización de una nueva prueba nuclear, esta vez con una bomba de hidrógeno, que coronó una serie de pruebas balísticas que ya llegan a 13 en lo que va de año.