Back to top
Huracán Irma

Cáritas Cuba mantiene articulada una red para socorrer a damnificados por Irma

La organización comprueba sobre el terreno las secuelas del huracán e identifica las principales necesidades de ayuda.

La Habana

Cáritas Cuba ha articulado una red de emergencia para desplegar acciones inmediatas de socorro a las personas más damnificadas y desvalidas luego del paso del devastador huracán Irma por la Isla, informó la edición digital de la publicación eclesiástica Palabra Nueva.

La organización ha realizado también un reconocimiento de las afectaciones en cada territorio, para trazar su plan de necesidades y de intervención, y los detalles de este fueron publicados este miércoles en un informe.

La oficina de Cáritas Camagüey, sin electricidad hasta la mañana del 11 de septiembre, se disponía a visitar en la tarde de ese lunes el municipio de Esmeralda, el más azotado por el paso de Irma. El domingo 10 y lunes 11, el obispo Wilfredo Pino llegó tanto a esa localidad como a Nuevitas, el otro municipio que sufrió daños, aunque en menor cuantía comparado con Esmeralda.

De acuerdo con el reporte, la oficina diocesana en Camagüey realizó compras antes y después del paso del huracán, fundamentalmente de cárnicos y pescados enlatados, galletas, leche en polvo, arroz, espaguetis, así como de artículos de higiene como detergente y jabón. Todos estos productos se distribuían a partir de la visita a Esmeralda, "en los hogares en los que se detectó una situación más apremiante".

La organización católica confirmó que se reportaban afectaciones en los templos del poblado de Jiquí y del central Jaronó (Brasil). Toda esta zona, al norte de la provincia camagüeyana, presentaba daños severos en cubiertas de viviendas, así como derrumbes totales y parciales (en los poblados de Jiquí, Brasil, Palma City y la cabecera de Esmeralda).

Ciego de Ávila

En Ciego de Ávila, el equipo diocesano visitó los municipios de Bolivia, Primero de Enero y Morón, en los cuales se detectó derribo de árboles de gran tamaño y afectaciones en techos de múltiples hogares, precisó Palabra Nueva.

De los servicios que sostiene Cáritas en estas zonas, se afectó el de lavandería en Bolivia, el comedor de Mamey y el techo de la guardería del poblado Violeta. De las instalaciones de la Iglesia Católica se reportó la pérdida de la cubierta del templo de Morón.

Otra zona ya visitada y con afectaciones severas es Júcaro, municipio que a pesar de encontrarse al sur de Ciego de Ávila sufrió inundaciones severas.

Según los reportes del equipo diocesano, Júcaro perdió unas 40 viviendas (derrumbe total), arrasadas por el mar al estar ubicadas en la primera línea de playa. El poblado completo (aproximadamente de 300 casas) registró penetraciones del mar; el agua subió aproximadamente a un metro de altura, y se afectaron las pertenencias de las personas. La mayoría no tuvo tiempo de ponerlas a buen recaudo por la premura con que se realizó la evacuación.

De acuerdo con los informes de la organización, la agricultura ha sufrido graves afectaciones, no solo en áreas de cultivos, sino también por la caída de grandes árboles frutales (mango, aguacate…) Respecto al tendido eléctrico, el equipo de Cáritas en la zona pudo constatar numerosos postes derribados en la carretera entre Mamey y Miraflores, al este de Bolivia (circuito Norte) y gran parte de la zona norte se encontraba sin corriente. La carretera entre Cunagua y Morón se ve obstruida en muchos tramos por derribo de árboles de gran tamaño.

En la tarde del lunes, el equipo diocesano visitó la zona de Punta Alegre, probablemente la más afectada en Ciego de Ávila. "Derrumbes totales y parciales aún no contabilizados por la magnitud del desastre, el derribo del templo local por la caída de la torre sobre el resto de la edificación, toneladas de sargazos que obstruían la primera calle paralela al mar y eran retirados por camiones estatales, fueron las imágenes que allí los recibieron".

Similar panorama observaron en la zona del central Punta San Juan, a un kilómetro de Punta Alegre. Entre ambos poblados, Cáritas Ciego de Ávila distribuyó 120 módulos de aseo personal y alimentos (70 en San Juan, 50 en Punta Alegre).

Ayuda a damnificados

Según Palabra Nueva, en la medida en que Cáritas Ciego de Ávila visita para hacer levantamiento de daños, implementó, además, servicios emergentes de cocinas para la comunidad, que se instalaron en casas de familias dispuestas a cocinar alimentos para la vecindad con los insumos que el equipo de emergencia les facilita.

En el caso de las provincias de Villa Clara y Sancti Spíritus, ambas atendidas por la Diócesis de Santa Clara, los principales daños se reportan en el poblado espirituano de Yaguajay (con un 35% del fondo habitacional afectado) y en los poblados costeros desde Corralillo hasta Sagua la Grande, Encrucijada y Camajuaní (este último el más azotado, con el 40% de su fondo habitacional igualmente destruido).

El equipo diocesano de Cáritas Santa Clara sigue recorriendo todas estas zonas, identificando las necesidades para proceder a brindar ayuda.

Cienfuegos

Por su parte, Cáritas Cienfuegos, no reportaba grandes daños en la ciudad, a pesar de su ubicación en la costa sur frente al mar, donde sí ocurrieron penetraciones moderadas.

El equipo diocesano recorrió las localidades de Palmira, Rodas, Cruces, Lajas, Camarones y Cartagenas, todos al norte de la provincia, en donde el Gobierno cubano reporta las afectaciones más complejas de dicho territorio.

En estas localidades Cáritas Cienfuegos ha distribuido algunos alimentos que pudo adquirir antes del paso del huracán (leche en polvo, aceite, etc.), así como otros que se tenían almacenados para las meriendas de los talleres diocesanos, que ante la emergencia se destinan al auxilio de los damnificados.

Al no reportar afectaciones tan severas como otros territorios, Cáritas Cienfuegos se preparaba para enviar recursos que pudo adquirir antes y después del paso de Irma hacia Ciego de Ávila.

Matanzas

Martí, Cárdenas, Varadero, Colón, Cabeza y la playa de la ciudad de Matanzas son las zonas donde mayor impacto tuvo Irma a su paso por la provincia de Matanzas.

Allí el equipo diocesano de ese territorio se encontraba el lunes después del ciclón en una situación crítica (sin agua, electricidad ni telefonía) recuperándose del paso del fenómeno meteorológico.

De acuerdo con el medio eclesiástico, Cáritas Matanzas no pudo hacer compras antes del paso del huracán por el desabastecimiento del mercado.

La Habana

Cáritas Habana comenzó el lunes tras el paso de Irma a recuperar su oficina, muy cercana al malecón habanero y, por tanto, expuesta a inundaciones. Sin embargo, desde el domingo, paralelamente, realizaba recorridos de reconocimiento desde Santa Fe hasta el final del municipio Playa, por toda la costa norte, y preparaba módulos para ayudar a las personas en cuyas viviendas penetró el mar.

Preliminarmente, Cáritas Habana ha ido realizando ayudas puntuales en hogares ya identificados como muy vulnerables en su trabajo previo de años ante situaciones de emergencia en el litoral habanero.

Un total de 35 familias en la zona del Vedado, 25 en la comunidad de Jaimanitas y otras diez en Santa Fe han recibido ya módulos con pomos de agua de cinco litros, jabones, un paquete de galletas, una lata de sardinas, una toalla, una bolsa de leche y un detergente en polvo.

Cáritas Habana repartió en sus parroquias un modelo de encuesta para que párrocos, monjas y equipos de la Pastoral Juvenil lo utilicen como herramienta para el levantamiento de los casos más críticos, hacia donde se enfocarán las ayudas.

Igualmente, el equipo de la capital ha asistido a la parroquia del Sagrado Corazón (sita en Línea entre C y D, Vedado), elaboraba desayunos y cocinaba comida en la noche desde el lunes después del huracán para los casos más desprotegidos de su comunidad.

Otras provincias

Guantánamo y Santiago realizaron envíos de lo acopiado antes del paso del meteoro a diócesis hermanas como Camagüey y Ciego de Ávila.

En Guantánamo Cáritas destacó las inundaciones en el malecón de Baracoa, que volvieron a golpear a ese territorio a menos de un año de sufrir los embates del huracán Matthew.

Asimismo, hizo referencia a los acumulados de lluvia en Palenque de Yateras, muy significativos; y muy especialmente la situación de la zona de Manuel Tames, donde más de 100 familias fueron afectadas y 12 casas sufrieron derrumbe total.

Cáritas Guantánamo asistía a estas familias con unos cien módulos de aseo personal, arroz, azúcar, latas de carne y sardina, etc. La organización en la provincia distribuyó, además, ropa y zapatos almacenados en sus oficinas producto de la recuperación de Matthew.

Principales necesidades

Por los reportes recibidos de todas las Cáritas diocesanas, la Oficina Nacional estimó como necesidades primarias más urgentes el agua embotellada, alimentos imperecederos (como arroz, azúcar, pastas, enlatados, cereales, leche en polvo, huevos, conservas…) y módulos de higiene (como detergente y jabón) para salvar la ropa y otros utensilios que sufrieron por la lluvia o inundaciones.

También colocó en la lista de necesidades módulos de sábanas y toallas, colchones y materiales para reparación de cubiertas (tejas por ejemplo).

La red Cáritas Cuba se encuentra en contacto inter-diocesano, adquiriendo los artículos de primera necesidad en las provincias donde se puede y planificando envíos a las más necesitadas, destacó Palabra Nueva.

Para ello, cuenta con el apoyo de organizaciones hermanas como Cáritas Alemania, Cáritas Suiza y CRS (Catholic Relieve Service), y de la comunidad emigrada o de amigos de Cuba que realizan donaciones a través del contacto internacional: Friends of Cáritas Cuba.

La organización de la Iglesia Católica prometió mantener al tanto, "en la medida de sus posibilidades, con limitaciones de tiempo y recursos de conectividad", sobre la labor que realiza la red de Cáritas en la Isla.

Sin comentarios

Necesita crear una cuenta de usuario o iniciar sesión para comentar.