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Derechos humanos

Un relator especial de la ONU recuerda a La Habana que 'disentir es un derecho básico'

Reitera su deseo de viajar a la Isla. El régimen le responde atacando su credibilidad.

La Habana

Michel Forst, uno de los relatores especiales de Naciones Unidas, emplazó en Ginebra al Gobierno de Cuba por "descalificación, represalias y acoso en contra de defensores de derechos humanos en el país".

La apelación figura en uno de los informes presentados por Forst, a cargo de la relatoría sobre la situación de los defensores de derechos humanos, durante la sesión 37 del Consejo de Derechos Humanos, que comenzó el 26 de febrero y durará hasta el 21 de marzo en Ginebra.

Los juicios sobre Cuba fueron motivados por la denuncia de Leticia Ramos Herrería, miembro de las Damas de Blanco, quien alega intimidación y agresiones físicas por parte del Gobierno, entre otras violaciones de sus derechos.

Tras agradecer la respuesta enviada por La Habana el pasado 15 de diciembre, el relator expresó su "consternación" ante la negación de los hechos alegados por Ramos Herrería y la descalificación de la defensora de derechos humanos, a quien las autoridades acusaron en su comunicación de "subvertir el orden legítimamente establecido" y estar "al servicio de una agenda de cambio de régimen".

Forst consideró que el acoso contra la Dama de Blanco no es un hecho aislado y aludió a reportes semejantes de años anteriores.

Ante la reincidencia, el relator lamentó "la negativa del Gobierno cubano a reconocer el valor de la labor de los defensores de derechos humanos" y aprovechó para recordar a La Habana "que disentir y expresar disidencia de forma pacífica, como lo hacen y lo han hecho las Damas de Blanco por varios años, son derechos básicos y necesarios en un Estado democrático".

Por último, el relator reiteró al Gobierno cubano su deseo de visitar la Isla, "para obtener una mejor comprensión de la situación de los defensores y defensoras de los derechos humanos en el país". Una solicitud semejante le fue denegada en 2015.

La prensa oficial, mientras tanto, se ha referido "al compromiso de Cuba con la promoción y protección de los derechos humanos", manifestado en Ginebra por Pedro Luis Pedroso, embajador del Gobierno cubano ante Oficina de las Naciones Unidas radicada en Suiza.

Pedroso afirmó este 28 de febrero, durante el segmento general del actual periodo de sesiones, que Cuba avanza "en el fortalecimiento de las vías, mecanismos y sostenibilidad de recursos a disposición de la población para asegurar el disfrute de sus derechos humanos".

En su intervención, el embajador cubano expuso la solidaridad de su país con Venezuela y el desacuerdo de La Habana con el reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel por parte de Estados Unidos.

De la relación de La Habana con el sistema de derechos humanos de Naciones Unidas, Pedroso recordó las visitas en 2017 de la relatora especial sobre la trata de personas y de la experta independiente sobre derechos humanos y solidaridad internacional, ambas invitadas por el Gobierno.

Mencionó también que el Gobierno se presentará en mayo al Examen Periódico Universal de derechos humanos y aseguró la disposición al "diálogo constructivo, respetuoso y apegado a la verdad".

No obstante, este 1 de marzo, Pablo Berti Oliva, delegado de La Habana, cuestionó a Michel Forst, aparentemente por su denuncia de la situación de los activistas de derechos humanos en la Isla.

"Nuevamente llamamos al relator sobre los defensores de derechos humanos a velar porque en el desempeño de sus funciones se brinde una especial prioridad a la objetividad, elemento vital para la credibilidad de su mandato", dijo Berti Oliva durante un diálogo interactivo.

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