Este viernes finalizaron los primeros enfrentamientos de la llamada Liga Élite del Béisbol Cubano, donde compiten los seis equipos mejor ubicados en la pasada Serie Nacional, reforzados con una docena de peloteros escogidos de los que no clasificaron.
La gran novedad de este torneo selectivo ha sido la realización de los partidos en horario nocturno, algo que pedían a gritos los peloteros, quienes llevaban varios años sufriendo las consecuencias que traen los desafíos diurnos.
Sin embargo, antes de entrar en detalles de lo que aconteció por estos días, llama la atención la cantidad de errores que se han cometido, ahora que los jugadores tienen la posibilidad de entrenar de día, se supone que estén concentrados los mejores atletas y que tiene un rendimiento físico superior.
Un total de 46 pifias en los 12 primeros juegos es todo un escándalo a este nivel, al punto que se está fildeando para 951 Ave, un promedio bajísimo para una liga que se respete.
La producción de cuadrangulares es otro punto que llama la atención, al conectarse apenas ocho en esta primera semana. No obstante, los directivos aseguran que la calidad de las pelotas fue certificada en persona por una comitiva de la Teammate, marca oficial del evento desde hace tres años.
Los otros parámetros de juego, como el bateo colectivo (286 Ave) y el pitcheo (3.97 PCL), estuvieron dentro de los rangos normales, incluso el control de los lanzadores, que tanto alarmó en la pasada campaña nacional.
Cierto que aún es muy temprano para conclusiones, pero lo más importante es que, a pesar de la crisis que se vive en la Isla, los cubanos han podido disfrutar de su pasatiempo favorito y los estadios han tenido una concurrencia bastante aceptable.
Los Leones de Industriales y los Gallos de Sancti Spíritus tuvieron el mejor arranque al vencer en tres de sus cuatro partidos, en un campeonato en el que no se puede parpadear, con un corto calendario de 40 juegos, donde cuatro de los seis equipos buscan un boleto para la postemporada.
Los capitalinos mostraron una buena ofensiva (344 Ave) para vencer a los campeones de la pasada contienda nacional, los Leñadores de Las Tunas, y los espirituanos aprovecharon la mala defensa de los Cazadores de Artemisa (11 errores en cuatro juegos) para ganar el duelo.
El otro pareo, entre los Cocodrilos de Matanzas y las Avispas de Santiago de Cuba, quedó igualado con dos triunfos por bando. Ambas escuadras mostraron un excelente pitcheo, al permitir menos de tres anotaciones limpias por desafío.
A partir de este domingo comenzarán nuevos enfrentamientos. Sancti Spíritus recibirá a Matanzas, Las Tunas a Artemisa y Santiago de Cuba a Industriales en el Guillermón Moncada, en lo que un día fue el clásico de la pelota cubana.
