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CUPET: acaba el olor a gas en La Habana con la parada de una planta de la refinería Ñico López

La estatal Cuba-Petróleo dice que la industria ubicada en Regla ha concluido, por el momento, las labores de refinación, y la percepción de olor a gas se desvanece.

La Habana
Refinería Ñico López de La Habana.
Refinería Ñico López de La Habana. @RefineriaHab/Twitter

La estatal Unión Cuba-Petróleo (CUPET) atribuyó el fin de la percepción de olor a gas en varios lugares de La Habana a la parada de una planta de la refinería Ñico López ubicada en Regla, según una nota publicada por el portal oficial Cubadebate.

"Durante varios días, grupos de trabajo integrados por especialistas de la refinería Ñico López, la Empresa de Gas Manufacturado, el Centro de Investigación del Petróleo, la Empresa de Gas Licuado y la Unión Cuba-Petróleo han mantenido las mediciones de calidad del aire en las zonas donde se han generado los reportes de percepción de olor, han dado seguimiento a las quejas e informado a la población", señaló CUPET.

Según el texto, el día 5 de septiembre no se reportaron quejas por parte de la población, "lo que puede estar asociado a la parada de planta uno de la refinería Ñico López por haber concluido, por el momento, las labores de refinación".

"La Unión Cuba-Petróleo reitera a los clientes de gas licuado y manufacturado que perciban olor a gas en sus hogares e instalaciones, que deben comunicarse con la empresa respectiva y hacer su reporte", añadió.

Por último, la empresa estatal dijo que "continúa laborando en la eficiencia de su gestión y permanente comunicación con el pueblo".

Los reportes de usuarios preocupados por los fuertes olores a gas en La Habana son frecuentesEn mayo de 2022 la Empresa de Gas Manufacturado de La Habana negó la ocurrencia de escapes de gas en sus plantas de producción y también desmintió que el proceso de odorización fue la causa de crecientes quejas de la población habanera.

Según se desprendió de declaraciones publicadas por el diario oficial Granma, lo que estaba ocurriendo obedecía a una cuestión psicológica, al temor generalizado tras la explosión del Hotel Saratoga, producida presuntamente por una fuga de gas. A raíz del desastre, varios centros estudiantiles y hospitalarios fueron evacuados por temor a un accidente.

Tal fue el caso del policlínico del Hospital Marfán-Borrás, ubicado en 27 y F, en el Vedado, el cual fue evacuado el 10 de mayo por un fuerte olor a gas, según pudo comprobar DIARIO DE CUBA a través de personas presentes en el lugar.

Ese mismo día la Defensa Civil de Cuba desestimó las quejas de la población habanera por la existencia de "un fuerte olor a gas" en varias zonas de la ciudad.

El día 11 de mayo se produjo otra explosión en una vivienda de La Habana Vieja debido a una fuga de gas, con un saldo de al menos tres heridos, según informó la propia prensa oficial, que descartó su vinculación con la catástrofe del Saratoga.

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