Díaz-Canel reafirma su apoyo a Palestina en Irán, cuyo régimen celebró el ataque de Hamás contra Israel

Miguel Díaz-Canel fue recibido este lunes por el mandatario iraní, Ayatollah Seyed Ebrahim Raisi, en el Palacio Sadabad, de Teherán, a donde llegó este domingo. La nación persa es la última parada de una gira por el Oriente Medio, en la que el gobernante cubano que ha buscado inversores y ha mediado por el grupo islamista Hamás.

En su cuenta de X, Díaz-Canel expresó felicidad por el reencuentro con el mandatario iraní y aseguró que "fueron muy positivas las conversaciones oficiales". De acuerdo con el gobernante cubano, dichas conversaciones fueron "expresión de los sólidos lazos de fraternidad entre nuestras naciones".

"Vamos a afianzar y a ampliar los vínculos bilaterales", anunció.

Según el medio estatal Cubadebate, Raisi y Díaz-Canel sostuvieron conversaciones privadas, por lo que se ignora de qué hablaron ambos gobernantes, que tienen en común una enemistad acérrima con Washington.

Díaz-Canel afirmó en X que "las esferas energética, agroalimentaria y de salud se identifican con gran potencial para fortalecer los nexos económicos, comerciales y de cooperación entre Cuba e Irán".

Cuba atraviesa una crisis energética que ha provocado prolongados apagones. Hace un año, Díaz-Canel emprendió un periplo por países gobernados por aliados, en busca de auxilio para aliviar los apagones que detonaron protestas populares en el país. Un año después, el régimen no ha sido capaz de dar una solución duradera a la situación energética.

La falta de comida es otro motivo de descontento, que ha llegado a generar protestas en Cuba. El régimen ya ni siquiera garantiza los escuálidos productos de la libreta de racionamiento. Recientemente, el Partido Comunista de Cuba exigió producción a los campesinos, pese a la baja inversión del Gobierno en la agricultura.

La mención de una posible cooperación en el sector de la salud hace suponer que Díaz-Canel ofreció a su anfitrión lo único que tiene el régimen cubano para ofrecer: profesionales de la salud que exporta y a los que despoja de hasta el 90% de sus salarios.

Díaz-Canel puso de manifiesto su alineación con el régimen de Irán al afirmar en X que en el encuentro con Raisi, ambos destacaron "la necesidad del cese de las sanciones unilaterales políticamente motivadas" y coincidieron "también en el apoyo inquebrantable a la causa palestina".

El régimen cubano nunca condenó la matanza de civiles a manos de Hamás, perpetrada el 7 de octubre. En cambio, ha lanzado una fuerte campaña a favor de Palestina, que incluyó una masiva marcha por el Malecón de La Habana en la que palestinos residentes en la Isla exhibieron carteles con fotos de los líderes de ese grupo armado.

Por su parte, el régimen iraní incluso celebró la agresión del grupo islamista el mismo día en que se produjo.

Con su viaje a Teherán, Díaz-Canel cumple la promesa que le hizo en junio a Raisi, durante la visita de este a La Habana.

En el encuentro que sostuvieron, Díaz-Canel expresó su intención de viajar a Teherán antes de que finalizara el año. Además, ambos gobernantes intercambiaron promesas de "complementación" para "enfrentar al imperio".

Durante esa visita se rubricaron varios acuerdos y memorandos de entendimiento, entre ellos un programa de cooperación integral que estrecha el marco actual de colaboración entre Teherán y La Habana; un acuerdo en materia aduanal sobre el movimiento internacional de mercancías y otro para la formación de personal para las Aduanas de ambos países.

Se firmaron también memorandos de entendimiento entre los ministerios de Relaciones Exteriores, los de Justicia y los de Comunicación de ambos países.

Antes de volar a Irán, Díaz-Canel visitó Catar, donde medió a favor de Hamás durante su encuentro con el jeque Tamim bin Hamad al Thanicon.

También hablaron del "relanzamiento de la colaboración económica y comercial" como uno de los temas fundamentales de las conversaciones oficiales, según dijo luego a los empresarios.

Mencionó el consenso a que llegaron las delegaciones oficiales para la creación de una comisión económica intergubernamental y un comité empresarial binacional, que contribuirá, además de incrementar los intercambios, a un mayor conocimiento en el empresariado catarí de las oportunidades y potencialidades económicas y comerciales que ofrece el Gobierno de Cuba.

En Emiratos Árabes Unidos, primera parada de su gira, Díaz-Canel se reunió con hombres y mujeres de negocios emiratíes, reabrió una Casa del Habano y dio palmadas a cubanos residentes en ese país encargados de amplificar la propaganda del Gobierno.

Allí también se sellaron pactos entre bancos, herramientas fiscales para la inversión, se hicieron promesas de más viajes para conectar ambos países y se pidió acceso a fondos del país anfitrión.