El biólogo cubano Ariel Ruiz Urquiola logró viajar a Alemania este jueves desde La Habana para continuar con su proyecto de investigación sobre el Valle de Viñales en la Universidad Humboldt de Berlín.
"¡Ariel hacia Alemania, lo dejaron salir!", comunicó su hermana Omara Ruiz Urquiola en su perfil de Facebook, junto con una imagen del joven científico a punto de pasar la puerta tras el chequeo de Inmigración en el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana.
El periodista Boris González Arenas dijo a DIARIO DE CUBA que conversó con Ruiz Urquiola por teléfono cinco minutos antes de despegar el avión y que se encontraba "sumamente feliz".
Omara, por su parte, confirmó a esta publicación que "pasó el control migratorio sin ningún problema, no le hicieron ninguna pregunta".
"Desde allá dentro me llamó y todo bien. Me parece mentira", dijo aliviada.
El biólogo había manifestado sus reservas al propio González Arenas de que el régimen cubano lo dejara salir, como ha hecho por estos días con tantos activistas políticos y miembros de la sociedad civil.
El pasado 8 de mayo de 2018, Ariel fue condenado a un año de privación de libertad por el delito de "desacato". La acusación impidió entonces un viaje precisamente a Alemania.
"El castrismo construyó el delito, la sanción y la condena, con la grosería que permite la impunidad. Un oficial del cuerpo de guardabosques de Viñales y jueces y fiscales de la peor ralea consintieron el engendro. Luego de poco más de un mes confinado, sin derecho al trabajo correspondiente a los internos de su condición, y sintiendo en carne propia el desamparo de los presos cubanos, se declaró en huelga de hambre y sed el 16 de junio, y con la resolución que ha caracterizado cada una de sus acciones se dispuso a morir", recordó González Arenas en una reciente información.
Por su determinación y la movilización en su favor dentro y fuera de Cuba, 16 días después, el 3 de julio de 2018, el régimen dio un paso atrás y lo sacó de las celdas alegando desórdenes de salud. Tras días de hospitalización, las autoridades finalmente le concedieron una licencia extrapenal.
La medida no lo puso en libertad, lo que impidió que viajara de inmediato a retomar sus investigaciones en Alemania. A mediados de mayo de este año, conoció por las autoridades de Inmigración que su derecho a viajar había sido restablecido. Antes, el día 2 de mayo, se había cumplido el conjunto de su sanción.