La juventud comunista cubana remueve a la 'ideológica' que destituyó al director de 'Alma Mater'

El Buró Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas de Cuba (UJC) destituyó de su cargo a Nislay Molina Nápoles, quien atendía la Esfera Ideológica de la organización desde 2020, y fue quien estuvo a cargo del despido de Armando Franco Senén, ex director de la revista Alma Mater. Según publicó el diario oficial Juventud Rebelde, la decisión obedeció a "movimientos de cuadros".

Tras su "liberación", a Molina Nápoles, que tuvo duras palabras para Senén Franco cuando fue citado para comunicarle su remoción, "le serán asignadas otras tareas" no precisadas. A la joven la sustituirá en el cargo "Meyvis Estévez Echeverría, actual miembro del Buró Nacional al frente de la Esfera Educacional".

La sustituta tiene "trayectoria en el trabajo profesional de la UJC hasta primera secretaria del Comité Provincial en Artemisa. Tiene 31 años de edad y es licenciada en Derecho", según el órgano de la UJC.

"Para atender la Esfera Educacional fue promovido Yaliel Cobo Calvo, quien se desempeñaba como primer secretario del Comité Provincial de la UJC en Cienfuegos desde el año 2019 y es Licenciado en Comunicación Social", añadió la nota.

La UJC ató "estos movimientos de cuadros en el Buró Nacional" al fortalecimiento de "la labor de la organización con jóvenes que se han vinculado a la vida laboral y acumulan experiencia de dirección juvenil".

En una denuncia a finales de abril, en la que el ex director de Alma Mater reveló los entresijos de su expulsión y acusó a la UJC de mentir sobre las razones para su despido, Armando Senén Franco explicó que fue citado a una reunión en la que Nislay Molina, la entonces "ideológica" del Comité Nacional de la UJC, y Asael Alonso Tirado, director de la Editora Abril, le anunciaron la decisión de cesarlo en su  cargo.

"Ante mi petición de explicaciones, ambos expusieron que 'la decisión, aprobada el 20 de abril, era producto de continuos errores en el trabajo editorial de la revista'. Sobre la mesa estuvo todo el tiempo un documento que ambos consultaron indistintamente para listar esos 'errores'", señaló.

"En aquel encuentro intenté explicarles el sinsentido de lo que exponían. La funcionaria de la UJC me interrumpió y entre otros criterios más bien groseros, que omito ahora por educación, dijo: 'A ti debimos botarte hace mucho tiempo, no hay nada más que hablar, te estamos haciendo el favor de liberarte. Puedes hacer lo que quieras, es una decisión nuestra'", citó.

A raíz de estos hechos, la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FDHC) incluyó en su lista de represores de "cuello blanco" a Molina Nápoles.

A fines de abril el anuncio de la expulsión de Franco Senén provocó numerosos cuestionamientos entre voces oficialistas.

El trovador cubano Silvio Rodríguez calificó como "triste" el despido del periodista y dijo estar preocupado porque la "Revolución acabe siendo contrarrevolucionaria" y sus adversarios parezcan o acaben siendo "revolucionarios", en comentarios publicados en su blog, Segunda Cita.

También el líder de la agrupación Buena Fe, Israel Rojas Fiel, mostró su apoyo a Franco Senén y pidió mediante una publicación en sus redes sociales que lo pongan a dirigir la revista Bohemia, pues "quizás así se rescata una publicación tan histórica y necesaria".

Por su parte, el presidente de la oficialista Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), Ricardo Ronquillo Bello, dijo que le "entristece" la decisión tomada por la UJC.

Ante ello, la primera secretaria de la UJC aseguró que la "liberación" (eufemismo que usa la burocracia del régimen para referir la suspensión de su cargo de un funcionario) de Franco Senén, "nada tiene que ver con una expulsión o sanción". Lo desmintió el propio joven en su publicación posterior.

No obstante, Franco Senén había dicho a DIARIO DE CUBA que su cese en el cargo era "una decisión de la organización a la que pertenece Alma Mater. Fuera de eso, no tengo mucho más que hablar. Entenderás que está el calor del momento y hay un proceso abierto en torno a eso. Estamos en la entrega y tal, en este momento no puedo decirte nada más".

Con respecto a la posibilidad de apelar la decisión de la organización oficial, el periodista dijo que "no es una opción que esté valorando ahora mismo".

La revista, fundada por el líder estudiantil Julio Antonio Mella en 1922 y en 1978 designada órgano del Consejo Nacional de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), fue una de las pocas publicaciones que tocó el tema de las protestas del 11 de julio en Cuba. Entrevistó a estudiantes de la Universidad de La Habana que participaron en las manifestaciones pacíficas.