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Brasil

El Senado de Brasil estudia la imputación de Bolsonaro por 'delitos' en el manejo del Covid-19

El informe de una comisión del Senado solicita que el presidente sea imputado por 11 delitos.

Brasilia
Jair Bolsonaro.
Jair Bolsonaro. Reuters

El tiempo parece acabarse para Jair Bolsonaro. Su manejo errado de la pandemia de Covid-19, alimentado por su tesis negacionista que tuvo impacto en la vida de miles de habitantes de Brasil, junto a presuntos hechos de corrupción, sobresalen en el informe que está próximo a presentar una comisión del Senado, la cual solicitará que el presidente sea imputado por 11 delitos.

El senador Renan Calheiros, del opositor y conservador Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), detalló este 11 de octubre los "crímenes" por los cuales se pedirá sea imputado Bolsonaro, incluyendo crímenes contra la salud pública y crímenes contra la humanidad. El informe de la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) podría ser la gota que derrame el base, dado que hay varios frentes políticos bregando por el impeachment contra el presidente para forzar su destitución o renuncia anticipada.

El Partido de los Trabajadores (PT), que está en las antípodas ideológicas, ha respaldo al PMDB en la investigación contra el jefe de Estado. El líder histórico del PT y dos veces presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, confirmó este 12 de octubre en diálogo con periodistas el cambio de posición de su partido. "El PT quiere el impeachment", zanjó tajante Lula da Silva el cuestionamiento que se le ha hecho a su partido de tener una posición ambivalente.

Algunos analistas creen que el PT no ha forzado aún el impeachment porque apuestan al desgaste de Bolsonaro para que enfrente a Lula da Silva en las elecciones que se realizarán exactamente dentro de un año, en octubre de 2022.

Lula da Silva confirmó el giro político, al sostener que es insostenible la presidencia de Bolsonaro por el impacto que tiene en la población el mal manejo de la pandemia, un asunto documentado por la CPI, la cual recibió el resuelto apoyo del dos veces presidente de Brasil.

Se espera que en pocos días se presente ante el pleno del Senado el informe de la CPI que deberá ser votado. Es muy posible que sea aprobado y tendrá de inmediato un impacto político sobre Bolsonaro.

Sin embargo, para que este informe tenga repercusión judicial se deberán esperar decisiones de la Fiscalía General y de la Procuraduría General, dado el rango de jefe de Estado que tiene Bolsonaro.

El otro camino, el del impeachment, se puede alimentar también del informe del Senado, pero para que se active este procedimiento, que ya ha eyectado a dos presidentes brasileños en democracia (Fernando Collor de Melo en 1992 y Dilma Rousseff en 2016), la clave está en el presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, en manos de Arthur Lira, un abierto aliado de Bolsonaro.

"Lo que quedó patente hasta la conclusión de los trabajos del comité de expertos es la ocurrencia de una gestión gubernamental deliberadamente irresponsable que viola la ley penal, con pronta rendición de cuentas. No se trata solamente del incumplimiento por parte de la gestión pública, estamos ante el constante rechazo de los conocimientos científicos producidos durante la lucha contra la pandemia Covid-19", reza un documento hecho por tres reconocidos expertos contratados por la CPI.

La CPI que documenta el mal manejo y posible corrupción con las vacunas por parte del Gobierno de Bolsonaro está asesorada por el exministro de Justicia y profesor de Derecho Penal de la Universidad de San Pablo, Miguel Reale Junior. Este experto es recordado porque en 2015, con una denuncia ante la Justicia en 2015, desencadenó el proceso de impeachment contra la entonces presidenta Rousseff.

La CPI fue instalada en abril y desde ese mes escucha a ministros, exfuncionarios, investigadores, médicos, especialistas, empresarios, parlamentarios y toda persona relacionada con el desempeño del Gobierno ante la pandemia.

De acuerdo con datos de la estadounidense universidad Johns Hopkins, en Brasil se ha registrado hasta la fecha más de 600.000 muertes y supera los 21 millones de contagios. En ciertos momentos de la pandemia tuvo las peores cifras globales, solo superado por EEUU.

En las sesiones de la CPI salieron a la luz pública anomalías para imponer la prescripción de medicamentos sin eficacia contra el Covid-19 y acciones irregulares, de presunta corrupción, en la negociación de las vacunas contra el virus.

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