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Animales

Activista cubano sobre las multas por maltrato animal: 'Hay que hacer mucho ruido para que actúen las autoridades'

Bienestar Animal en Cuba logra una segunda sanción tras el Decreto-Ley: una multa de 2.250 pesos al dueño de un perro maltratado.

Madrid
Danger, el perro maltratado en Matanzas.
Danger, el perro maltratado en Matanzas. BAC-Matanzas/Facebook

Apenas dos condenas por maltrato animal han logrado en Cuba los animalistas después de la puesta en vigor del Decreto-Ley de Bienestar Animal: una de ellas porque "se hizo un escándalo en las redes sociales y se logró que las autoridades actuaran a tiempo", y la otra, más recientemente, pero "no con tanta prontitud porque este caso no tuvo tanta repercusión", dijo Javier Larrea Formoso, presidente de Bienestar Animal en Cuba (BAC).

El pasado 30 de septiembre se le impuso una multa de 2.250 pesos a Álvaro Soto Sotolongo, dueño del perro Danger, "por las agresiones graves y disímiles maltratos a los que estaba sometido, como la alimentación inadecuada o falta de alimentos, espacio no adecuado para su confort y movilidad, estando amarrado y en el exterior aventurado a las fluctuaciones meteorológicas, denotando una marcada desprotección y negligencia del propietario", notificó Mabel María del Castillo Toledo, jefa del Departamento Provincial de Sanidad Animal en Matanzas, a BAC en esa provincia.

Según BAC Matanzas, el caso de Danger fue presentado el 15 de agosto y fue resuelto más de un mes después. Sin embargo, la primera multa por maltrato animal en Cuba fue resuelta solo un día después de la denuncia en las redes sociales, por lo que Larrea sostiene que "hay que hacer mucho ruido en las redes sociales para que las autoridades actúen".

"La vía sigue siendo, primero, redes sociales; si el caso tuvo un gran impacto, entonces las autoridades actúan y dan el paso. Si no, se archiva. Yo antes de que aprobaran la Ley sabía que una vez que se aprobara esto iba a ser así: se iba a aplicar a aquellos casos en los que la gente formara mucho ruido, para apagar ese fuego y decir ‘mira, nosotros actuamos’. A ellos (las autoridades) no les interesa mucho actuar en aquellos casos que la mayoría de la sociedad desconoce, pero que suceden a diario y no tienen la misma visibilidad de estos dos casos que han sido procesados", dijo Larrea a DIARIO DE CUBA.

Larrea recordó que la primera condena por maltrato animal fue resuelta en poco tiempo por el impacto en las redes sociales. En Alquízar, Artemisa, fueron sancionados tres personas con 3.000 pesos (el doble de los establecido por la Ley) por "las severas lesiones que condujeron a la muerte al animal (un gato), empleando formas extremadamente brutales y violentas", según informó la prensa estatal dos días después de las denuncias.

"Las condenas no son suficientes, se mantienen en el derecho administrativo, son infracciones, se les ponen multas pero hasta ahora mismo ninguna tipología de maltrato animal en Cuba es un delito que esté tipificado en el Código Penal y por el que la persona pueda sufrir grandes condenas", dijo el animalista.

"En Alquízar no se correspondían los hechos que habían cometido con la sanción que le pusieron de pagar solamente una multa por unos cuantos pesos (...). Te sale más caro una multa por tener el nasobuco bajo que por maltratar a un animal, y de la forma en que ellos lo hicieron, con alevosía, con ensañamiento, con maldad. Conscientes de lo que estaban haciendo, lo subieron a sus redes sociales, a sus estados de WhatsApp. No les interesó nada. Estaban conscientes de que no les iba a pasar nada, que la Ley no iba a actuar. Se sentían impunes ante lo que hacían, pero lo que no predijeron era que iba a tener tanta repercusión y que la gente iba a rechazar tanto eso, que terminó siendo afortunadamente uno de esos casos en que la Ley ha actuado”, señaló.

En cuanto al caso de Matanzas, Larrea dijo que se logró que las autoridades actuaran "después de un largo proceso y con un abogado que nos estuvo asesorando todos estos trámites. Este no tuvo tanta repercusión en las redes, pero sí se hizo por todas las vías".

Ante las dos sanciones por maltrato animal en Cuba, abogados consultados por este diario señalan que "aunque lo veamos como un logro, que lo es, bienestar abarca mucho más que garantizar que las infracciones reciban un castigo". Además, coinciden con Larrea en que las multas son irrisorias en un país donde por otras cuestiones, principalmente económicas, pueden llegar hasta los 15.000 pesos o más.

"Lo que pasa con la mayoría de los casos de maltrato animal es que la gente denuncia a los correos y a los teléfonos y las autoridades no responden, no hacen ningún tipo de notificación de que se va a tramitar el caso", dijo Larrea. Insistió en que las redes sociales siguen siendo el mejor camino para reclamar que se aplique el Decreto-Ley de Bienestar Animal en Cuba.

Bicicletada y feria de adopción animal en La Habana

BAC Cuba trabaja cada semana para visibilizar la causa de los animales en la Isla. Este fin de semana realizarán una bicicletada y una feria de adopción en La Habana

Junto al proyecto Jungla y el club Floww me, la "Animacletada" tendrá tres rutas este sábado desde las 8:00AM. La ruta corta sale de B e/ 23 y 35, hasta el parque ecológico Monte Barreto; la media sale de Prado e/ San Lázaro y Capdevila, hasta el parque Lenin; y la larga sale de Línea y 6, hasta Banes , Artemisa", informó BAC en un comunicado enviado a este diario.

También este sábado, BAC hará una feria de adopciones en el Parque Ecológico de Monte y Barreto, en 9na y 70, Playa, a las 10:00AM. "Esta vez le daremos la prioridad a animales adultos, porque ellos, a pesar de iniciar su vida bajo sufrimiento y abandono, también merecen encontrar un hogar para ser queridos", detallaron en un comunicado.

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2 comentarios

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Pobre animalito si la dictadura no respeta a los cubanos poniéndolos presos por pensar distinto tiene miles de presos asta menores de edad mujeres ,por que no comparten sus ideas , imagina un pobre perro en Cuba no se respeta a los animales

Los desgraciados abusadores que maltratan animales debieran sufrir penas de carcel, no multas ni pendejadas.