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agricultura

Los productores cubanos podrán comercializar carne bovina… después de cumplir con el encargo estatal

El Gobierno publica 30 medidas con las que pretende resolver la crisis de la Agricultura. Para el economista Pedro Monreal, convendría poner a un lado el eufemismo de 'dinamizar' la producción.

La Habana
Siembra de la Agricultura Urbana.
Siembra de la Agricultura Urbana. acn

El Ministerio de Agricultura de Cuba (MINAG) publicó el lunes las 30 medidas con las que pretende salir de una crisis alimentaria enquistada en el sistema y el Gobierno atribuye al embargo y al Covid-19.

"Considerar a los productores agropecuarios individuales como parte de la base productiva agropecuaria; priorizar las inversiones en los programas productivos con mayor impacto en la sustitución de importaciones y las exportaciones; y aplicar un tratamiento financiero a un grupo de cooperativas que reflejan pérdidas en la actualidad y tienen posibilidades de continuar en operaciones", son algunas de las acciones delineadas por el MINAG, precisó la oficial Agencia Cubana de Noticias (ACN).

De igual forma, las autoridades buscan aumentar "la producción de alimentos a nivel local, incluyendo la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar, y los módulos pecuarios". En tal sentido, el texto de las medidas dice que se "potenciará el desarrollo de la minindustria para la elaboración de productos con este destino"; y se "recuperará la producción estatal en los 26 integrales porcinos".

El MINAG también intentará "potenciar en las empresas avícolas la producción de carne y huevo; implementar las 28 medidas previstas para la recuperación de la ganadería bovina, concebidas en la Estrategia económico-social".

Según el documento con las medidas, también se autorizará la comercialización de carne bovina y el autoconsumo a los productores, pero después de cumplir con el encargo estatal, y siempre que garanticen que no haya decrecimiento de la masa ganadera.

Se autoriza, además, "la venta de leche y sus derivados a partir del cumplimiento del plan de entrega e indicadores establecidos por la ganadería; y se desarrollará en las empresas estatales, cooperativas y productores agropecuarios, el diseño y gestión de productos de turismo de naturaleza y rural, bajo modalidades de proyectos de desarrollo local".

El MINAG da luz verde "a los productores agropecuarios, que cumplan los requisitos de calidad e inocuidad de los alimentos, a que comercialicen de forma directa carne de ganado menor en la red minorista en CUP y MLC".

Sin embargo, el documento no precisa cómo será el proceso para avalar esos requisitos de calidad e inocuidad, solo en manos del Estado y sus mecanismos burocráticos.

Para el economista Pedro Monreal, las nuevas medidas publicadas deberían ir más allá de eufemismos como "dinamizar".

"Si existe un área de la economía cubana donde es imprescindible ser precisos, esa es la actividad agropecuaria. Convendría poner a un lado el eufemismo de 'dinamizar' la producción. De lo que se trata realmente es de superar una severa crisis agropecuaria", señaló al compartir el titular publicado por el portal oficial Cubadebate.

Monreal llamó la atención sobre dos medidas relativas al financiamiento: "La número cuatro, utilización más eficiente de las divisas para financiar la producción nacional de alimentos, y la número cinco, priorizar importaciones de insumos", precisó.

"Ambas medidas para el financiamiento de la agricultura incluyen componentes condicionales ("hasta donde resulte posible" y "dentro de las posibilidades") que las hacen aparecer más como anhelos que como una acción practicable", sostuvo el analista.

Para Monreal, "no es suficiente un enunciado general para diseñar medidas urgentes dirigidas a resolver una crisis. Es imprescindible identificar los recursos que se necesitarían, aunque fuese de manera aproximada".

"Medir es importante. Ayuda a distinguir entre el deseo y lo factible", añadió.

"La información disponible indica que las importaciones de dos insumos cruciales —fertilizantes y agroquímicos— se han reducido notablemente, desde mucho antes de la pandemia. Es poco probable que el agro 'levante' si esas importaciones no crecen".

Entre 2015 y 2020 las importaciones anuales de fertilizantes y de agroquímicos promediaron 80 y 60 millones de dólares, respectivamente, es decir 140 millones de forma combinada. "Se necesitaría llegar a esa cifra, desde el nivel de 40 millones de 2020", dijo Monreal.

Para el economista, "llevar las importaciones combinadas de fertilizantes y agroquímicos al promedio anual de 140 millones de dólares exige redistribución de recursos, algo muy difícil en medio de una crisis. Probablemente se necesitaría vender activos (total o parcialmente), por ejemplo, hoteles".

"Pudiera esperarse la objeción de que vender hoteles (o un porciento de la propiedad de estos) reduciría ingresos futuros. Sin embargo, la producción de alimentos es hoy una urgencia (no es tanto un tema del futuro) y, además, Cuba tiene un exceso crónico de capacidad de alojamiento", consideró.

Pese a las escasez generalizada y en medio de la pandemia de coronavirus, las autoridades cubanas no han dejado de levantar nuevos hoteles. A finales de abril, el periódico oficial Escambray, informó que el hotel Meliá Trinidad Playaen la península de Ancón, en Sancti Spíritus, está "a un paso de concluir la construcción".

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