El grupo estatal TABACUBA, encargado de la comercialización de puros cubanos en el mundo, achacó al embargo de EEUU a los productos de la Isla el que su empresa dejara de vender 50 millones de unidades en ese mercado.
El vicepresidente primero del Grupo Empresarial de Tabaco de Cuba (TABACUBA), Miguel Vladimir Rodríguez, dijo a la agencia oficial Prensa Latina que las afectaciones a las ventas a ese mercado supuso pérdidas por 140 millones de dólares entre abril de 2018 y marzo de 2019.
Las mayores pérdidas las padece el tabaco Premium torcido a mano, dijo el funcionario, quien aseguró que EEUU es el principal mercado de este tipo de producto, pues consume más de 400 millones de unidades, la mayoría producida en Nicaragua, República Dominicana y Honduras, mercados que sustituyeron el suministro procedente de Cuba a partir de que las exportaciones de la Isla cesaran en 1962.
Rodríguez aseguró que son los estadounidenses quienes mayores compras de tabaco hacen en Cuba, pero a partir de la activación del Título III de la Ley Helms-Burton, "se incrementaron los controles en la frontera para limitar" las importaciones para consumo personal.
El funcionario de TABACUBA comentó que estudios de mercado sobre las ventas de tabaco hecho a máquina indicaron que en el mundo se consumen 20.000 millones de unidades aproximadamente, de los que cerca de 5.500 millones se fuman en EEUU.
En 2015, un estudio estimó la oportunidad comercial para los productos tabacaleros cubanos hechos a máquina en unas 45 millones de unidades, con un margen bruto para el negocio de 18 millones de dólares.
Los tabacaleros cubanos antes de 1959 vendían en EEUU más de 20 toneladas de tabaco en rama como promedio.
Tras el acercamiento diplomático entre La Habana y Washington durante la Administración Obama, se aprobó que la mayoría de los viajeros estadounidenses pudieran llevar de vuelta a su país hasta 100 cigarros y varias botellas de ron desde Cuba, lo que generó ingresos anuales por cientos de millones de dólares para el Gobierno cubano.
La disminución del turismo de EEUU tras las nuevas sanciones contra La Habana del Gobierno de Donald Trump han afectado esas ventas.
El embargo tambien es el culpable de que no haya yuca ni boniato en los mercados. A los gringos les encantan esos tuberculos producidos en cuba.
De que otra cosa no tiene culpa el imperio? Se abren las apuestas.