"¡Basta ya de ofensas!", escribió la joven cubana Mailén Díaz Almaguer, única sobreviviente del accidente sufrido por un avión de Cubana de Aviación en mayo de 2018 que costó la vida a 112 personas, en respuesta a los numerosos ataques recibidos tras criticar la escasez de medicamentos en la Isla.
"A todo el que le afecte lo que escribo en mi página, por favor, retírese de ella", agregó Díaz Almaguer, quien pidió ayuda a sus seguidores en redes sociales la semana pasada para conseguir Nitrofurantoina, un antibiótico utilizado para combatir las infecciones en las vías urinarias que se encuentra agotado en las farmacias de la Isla.
La joven también quiso agradecer a quienes se mostraron preocupados por su situación, por lo que agregó: "Buenas noches, bendiciones y millones de gracias a todo el que me quiere bien, no tengo palabras para agradecer todo el apoyo".
Tras las quejas de Díaz Almaguer el pasado viernes 9 de octubre por la carencia de medicamentos muchas personas se brindaron para ayudarla, pero otras la llamaron "desagradecida", a lo que respondió diciendo que siente gratitud por los médicos que la atendieron, pero no le "debería faltar ningún medicamento, aunque estuvieran en falta".
El desabastecimiento de medicamentos en Cuba se ha incrementado considerablemente durante los últimos meses, a pesar de los numerosos anuncios publicados por la prensa estatal acerca de donaciones por parte de países como China, Rusia y Japón, así como de la Organización de las Naciones Unidas.
A finales del mes de septiembre fue Edesio Alejandro, un reconocido músico cubano, quien solicitó a través de su perfil de Facebook un medicamento llamado Amantadina y un antibiótico llamado Ciprofloxacina.
En septiembre fue la hija de la etnóloga cubana Natalia Bolívar quien pidió a la Aduana cubana, aprovechando la fecha del cumpleaños de su madre, que le entregase unos fármacos retenidos desde marzo, pues no se encuentran en la Isla actualmente.
Poco antes el actor cubano Héctor Noas demandó públicamente un medicamento llamado Copidrogel, pues el destacado cineasta y escritor cubano Enrique Pineda Barnet, de 87 años, lo necesita para evitar sufrir accidentes cerebro vasculares, pero está en falta en Cuba.
También el actor cubano Bárbaro Marín se quejó recientemente de la escasez de Salbutamol, un producto muy demandando por los asmáticos en Cuba, donde al menos 50.000 personas padecen esa enfermedad en su forma más severa.
La falta de medicinas en las farmacias cubanas en un problema que afecta a la población desde años atrás. En el mes de julio de 2019 las autoridades de Salud informaron que se encontraban en falta 47 fármacos diferentes.
Un reporte emitido por la televisión cubana el pasado mes de julio reveló que las farmacias y hospitales de la Isla no contarán con algunos medicamentos básicos como metronidazol, clordiazepóxido, cotrimoxazol, paracetamol y dipirona en los próximos meses.
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Si esta muchacha no viviera en el vertedero revolucionario, sería millonaria con la indemnización que le hubieran tenido que dar. Hasta capaz que el Estado cubano cobre por los muertos y por ella y se roben el dinero completo. Dejen tranquila a la joven.
Esta niña es una víctima más del fascismo castrista; el “bloqueo” y el “imperialismo” no son la justificación para poner en peligro la vida de los Cubanos arrendando aviones desechados a compañías sin certificación o poco confiables. A los castro les sobra el dinero para comprar equipos de calidad. Si la disculpa es el “embargo”, los castro lo han violado como y cuando les ha convenido.
Los arrastrados que critican a esta muchacha diciéndole mala agradecida con la involución, espero que el karma se ocupe de ellos. Hay que ser muy pero que muy degenerado para cebarse en una persona que ha sufrido tamaño accidente que la marcará para el resto de su vida. En cualquier país normal esa joven habría recibido una indemnización que al menos le haría mucho más fácil la vida que tiene que llevar de ahora en adelante.