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Béisbol

El prospecto Narbe Cruz viaja de los Industriales a firmar con los Astros de Houston

En tiempos de coronavirus una firma dentro del béisbol puede que valga el doble, incluso el triple, en comparación a épocas anteriores.

Miami
Narbe Cruz.
Narbe Cruz. DDC

El talentoso infielder habanero Narbe Cruz acordó firmar un contrato con los Astros de Houston, según le dijeron fuentes a DIARIO DE DUBA en el día de ayer. Cruz, de 19 años, 6,3 pies de estatura y 185 libras de peso salió de Cuba en el 2019 y en menos de 12 meses ha logrado coronar el "primer sueño" de todo beisbolista: llegar al profesionalismo.

La firma se hará oficial después del 15 de octubre y Cruz recibirá un bono de 218.000 dólares.

Su nombre estuvo entre los 34 que la Federación Cubana de Béisbol (FCB) envió en marzo de 2019 a Major League Baseball (MLB) como parte de una relación de peloteros elegibles a firmar con equipos de Grandes Ligas. Sin embargo, la Administración Trump mandó a congelar el acuerdo y las ilusiones de varios cubanos se desvanecieron. De esos 34, 11 jugadores ya no se encuentran en Cuba y Narbe es uno de ellos.

"Después de esa cancelación del acuerdo entre Cuba y la MLB influyó mucho en mi decisión de irme del país", dijo Cruz.
Asentado en República Dominicana, inició una nueva etapa de entrenamientos en la Academia de Carlos Paulino, destacado promotor y agente dominicano. Cruz posee unas cualidades atléticas innatas y marcó 6.8 en las 60 yardas. Los scouts evaluaron su brazo con 60 en la escala de 80 así como el poder en 55.

"Tengo varias expectativas ahora en mi carrera", aclara. "Pero la más importante es ir avanzando paso a paso, mejorar cada día y tratar de llegar a Grandes Ligas".

Cruz no olvida a los entrenadores de los que más aprendió en Cuba. Entre los que menciona se encuentran Orbe Luis Rodríguez, Ezequiel González y Pedro Ismael Martínez.

En tiempos de coronavirus una firma dentro del béisbol puede que valga el doble, incluso el triple, en comparación a épocas anteriores. Los scouts son más celosos en el área de la búsqueda de talento internacionales, la selectividad se agudiza y las franquicias de MLB ya no tienen el mismo espacio en su sistema que antaño. Es por eso que este logro de Cruz tiene valor por sí mismo.

Cruz participó con los Industriales en la 59 Serie Nacional antes de marcharse de Cuba. Sin un amplio cúmulo de oportunidades, bateó seis hits en 30 turnos y conectó dos dobles, mientras a la defensa pasó por la segunda y tercera base, campo corto y jardín derecho en la nave dirigida por Rey Vicente Anglada. Sin embargo, luego lo motivó más la constante del pelotero cubano en la última década: ver más su futuro afuera que adentro.

"Ese corto paso por Industriales fue un sueño cumplido que yo tenía desde pequeño. Lo considero bastante positivo. Siempre que me dieron la oportunidad, entregué todo de mí", relató.

El tiempo de Cruz en el béisbol recién comienza. La adaptación a una nueva cultura estará entre sus asignaturas a cumplir, además, de lo más esencial de todo: lograr el salto de calidad de su talento para materializar los objetivos. No obstante, este primer paso puede considerarse un triunfo para él.

"Le dedicó este triunfo primero y en especial a mi madre, a mi familia, a todas esas personas que siempre confiaron en mí y siempre me apoyaron. Y a los que no lo hicieron también, por darme más fuerza para cumplir este sueño", afirma.

 

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