Valen penas al mazo, la cháchara
esa trivial de los mercados como un eco
que sube hasta la ventana de la calle.
Las burbujas
tan pacientes del eco —de cualquiera, donde
cualquier rumor que espume su mesura
deja un trazo de aliviada cortesía.
Tras suyo el eco de los paisajes, el estaño
que los ancla a quien ya no los contempla:
su murmullo que resuena demorado,
que tarda para arribar a su alabanza.
A su loa, presto el eco, las gárgaras
remotas de cuál hazaña tan rumiada.
El eco trivial de la prisa y del decoro
con que se untan afeites las palabras:
una asoma la primera y la secundan
como un río las que siguen en la fila.
Lugares, plazas que secundan ese esfuerzo:
postales de la memoria, apaño de brocante.
Waldo Pérez Cino nació en La Habana en 1972. Sus últimos libros de poesía publicado son Apuntes sobre Weyler (Bokeh, Ámsterdam, 2012), Tema y rema (Bokeh, Ámsterdam, 2013) y Escolio sobre el blanco (Bokeh, Ámsterdam, 2014) y Aledaños de partida (Bokeh, Ámsterdam, 2015). Este poema pertenece a este último libro.
Otros poemas suyos: Curva de lo propio, An almond for a parrot, Lago Constanza y Secuela de Procusto.