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Telecomunicaciones

A tres años de las primeras medidas, el 'Gobierno electrónico' en Cuba todavía está muy lejos

Díaz-Canel pide 'seguimiento constante' al asunto. Dice que 'la informatización es una de las tareas que la población más agradecerá'.

La Habana

A más de tres años de que el Consejo de Ministros aprobara las primeras medidas para alcanzar el "Gobierno electrónico" en la Isla, su implementación todavía se ve lejos, según admitieron dirigentes en una reunión en la que Miguel Díaz-Canel pidió "seguimiento constante" del asunto.

Según recoge el sitio oficial Cubadebate, Cuba ocupa la posición 131 del ranking de "Gobierno Electrónico", de 193 países encuestados, de acuerdo con datos de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

El valor del Índice de Desarrollo del Gobierno Electrónico de Cuba es de 0,35 (de uno, el máximo posible), una cifra en la que se miden factores como los servicios en línea y la infraestructura de telecomunicaciones, que en la Isla van descabezados bajo la política del monopolio estatal ETECSA, así como el capital humano.

Para lograr poner a funcionar el "Gobierno electrónico", las autoridades cubanas han propuesto cuatro etapas: la presencia en internet; la interacción de la Administración Pública, el Gobierno y la población; la transacción, donde se usen pagos electrónicos en trámites y servicios; y la transformación, que "incluye la participación del pueblo en la construcción de las políticas públicas y en la gestión de la administración y el Gobierno".

Sin embargo, aún no está cumplida ni la primera de estas fases. ETECSA sigue haciendo pruebas fallidas antes de comercializar el servicio de internet en los móviles a un precio que aún los cubanos desconocen. El tercero de estos experimentos, realizado el fin de semana pasado, generó numerosas afectaciones a aquellos que intentaron conectarse.

El ministro de las Comunicaciones, Jorge Luis Perdomo Di-Lella, espera que se complete en diciembre de este año, cuando "todos los organismos y gobiernos territoriales tendrán que contar con portales institucionales públicos, bajo el dominio gob.cu".

Al respecto, el viceministro primero, Wilfredo González Vidal, mencionó entre "las principales dificultades la inexistencia en algunos casos de catálogos en línea con los servicios y trámites que ofrece el organismo o entidad; información sobre la planificación de actividades o eventos; y un directorio con correo electrónico y teléfonos de contacto institucionales de directivos y funcionarios".

Además, dijo que los portales web oficiales presentan problemas de configuración, disponibilidad y lentitud en la respuesta ante las solicitudes, que a la vez dificultan el posicionamiento y niveles de rendimiento.

Durante el encuentro fue presentada la experiencia de Mayabeque con la Unidad de Servicios y Trámites del municipio de Güines, que las autoridades presentaron "entre los resultados más importantes del experimento que se aplica en la provincia, con un enfoque de ventanilla única que integra 106 servicios y trámites pertenecientes a ocho organismos".

Díaz-Canel consideró "indispensable avanzar en la informatización de los registros públicos, con especial énfasis en la Oficina de Control para la Distribución de los Abastecimientos", la célebre Oficoda, cuyos procesos aún se hacen de manera manual y presencial.

Para el gobernante, "la informatización es una de las tareas que la población más agradecerá", teniendo en cuenta que "ahorrará trámites, tiempo, intermediarios y costos".

"Se supone —dijo— que seamos más eficientes, que haya más productividad, más rendimiento y, por tanto, menos gente dedicada al papeleo".

Los cubanos se quejan de que el ritmo de la informatización es demasiado lento en la Isla. Cuba está instalando solo tecnología 3G, pese a que la mayor parte de América Latina se ha cambiado a 4G, en tanto, la red 5G está en sus etapas finales de prueba en otras partes del mundo.

El índice anual de desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU) sitúa a Cuba en el puesto 166 de 176 países en cuanto a acceso, y en penúltimo lugar en Latinoamérica, donde solo Haití muestra peores indicadores.

La expansión de internet y el derecho de los cubanos a utilizarlo es un asunto delicado en un país cuyo régimen es acusado por varias organizaciones de derechos humanos de censurar contenidos e impedir el libre flujo informativo, y donde todos los medios son estatales.

El informe de Amnistía Internacional 2017 sobre Cuba alertaba de "restricciones indebidas" al acceso y libertad de expresión en internet y citaba al menos 41 sitios web críticos bloqueados desde la Isla. 

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