Back to top
RUSIA

Más de 20 países han expulsado a diplomáticos rusos por el caso del exespía envenenado en Londres

El Kremlin afirma que entre el centenar de sus funcionarios expulsados hay agentes de Inteligencia.

Moscú

Unos 23 países han expulsado en los últimos dos días a arededor de un centenar de diplomáticos rusos de sus territorios después de que Londres pidiera tomar medidas por el caso del envenenamiento del espía doble Serguéi Skripal en suelo británico, reporta EFE.

Montenegro se sumó este miércoles a los países que no son miembros de la UE (Estados Unidos, Canadá, Albania, Macedonia, Noruega, Ucrania y Australia) que han secundado la expulsión de diplomáticos rusos anunciada el lunes por Bruselas y después por la OTAN.

"Esperemos que aquellos países que se solidarizaron con el Reino Unido y expulsaron a nuestros diplomáticos consideren oportuno replantearse cuán verídica es la información que se presenta como prueba sobre la implicación de Rusia en los sucesos de Salisbury", dijo Dmitri Peskov, el portavoz del Kremlin, a la prensa local.

No obstante, Peskov insistió en que "veinte o treinta países son solo una parte de la comunidad internacional".

Según informó este miércoles la prensa rusa, la decisión de apoyar a Londres se fraguó en la reunión celebrada el pasado 22 de marzo en la embajada británica en Moscú, un día después de que la Cancillería rusa convocara a los diplomáticos extranjeros para exponerles la postura oficial del Kremlin.

En dicha reunión con diplomáticos de más de 80 países Londres pasó de afirmar que existe una "alta probabilidad" de que Rusia esté detrás del ataque con un agente químico contra Skripal y su hija a acusar abiertamente al Kremlin de ser "sin lugar a dudas" culpable de la agresión.

El diario Kommersant informó este miércoles que el embajador británico, Laurie Bristow, aseguró que el empleo en Salisbury del agente nervioso "Novichok", de fabricación rusa, había sido el primer caso de uso de un arma química en suelo europeo desde la Segunda Guerra Mundial.

"No hay duda alguna de que Rusia es responsable. No hay ningún otro país que tuviera las posibilidades, las intenciones o los motivos para ello. No existe ninguna confianza en una explicación alternativa", cita el diario.

Finalmente, el embajador repasó el historial desestabilizador de Rusia desde el asesinado del exespía Alexandr Litvinenko en 2006, acusó a Rusia de limitarse a desinformar y meter cizaña entre los aliados y pidió el respaldo de la comunidad internacional.

"Debemos mostrar a Rusia que debe ser llevada ante la Justicia por lo ocurrido", dijo el diplomático.

Al respecto, el embajador estadounidense, John Hantsman, aseguró a la prensa rusa que la información facilitada por Londres había sido "muy convincente".

En cambio, Peskov aseguró que dicha información no resiste "ninguna crítica" e insistió en que Londres no ha aportado aún pruebas sobre la culpabilidad de Rusia.

"Esto es un fracaso de (la primera ministra británica) Theresa May. La mayor manipulación de la opinión pública mundial en la que está involucrado el Gobierno británico ha sido puesta al descubierto", comentó por su parte la portavoz de la Cancillería, María Zajárova.

Peskov también adelantó que "en el momento oportuno" el Kremlin anunciará medidas de respuesta que responderán "a los intereses nacionales" y que la presidenta del Senado, Valentina Matviyenko, adelantó que serán "simétricas".

El viceministro de Exteriores, Serguéi Riabkov, aseguró este miércoles que las medidas de represalia deben tener en cuenta "el nivel de hostilidad" de la política de EEUU y el Reino Unido hacia Rusia.

Y denunció la presión "sin precedentes" que ambos países ejercieron sobre sus socios para que secundaran su decisión de expulsar a los diplomáticos rusos, que, de lo contrario, nunca se habría producido.

A su vez, Rusia reconoció hoy que entre los diplomáticos expulsados por los países occidentales figuran varios oficiales del Servicio de Inteligencia Exterior (SIE).

"Entre los funcionarios de Exteriores hay representantes oficiales de nuestro servicio (...), son unos pocos", dijo Serguéi Narishkin, el jefe del SIE.

Narishkin afirmó que los agentes expulsados, que trabajaban oficialmente en esos países como agentes del SIE, se dedicaban a garantizar la cooperación con los servicios secretos de dichos Estados.

Archivado en

Sin comentarios

Necesita crear una cuenta de usuario o iniciar sesión para comentar.