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Venezuela

Maduro reconoce que habrá 'graves dificultades' en su segundo mandato, pero culpa a Washington

Exige a los militares firmar un documento de 'lealtad'. Dice que ha desmantelado una 'conspiración' vinculada con EEUU y Colombia.

Caracas

Nicolás Maduro juramentó para su segundo mandato en Venezuela y adelantó que el escenario para este nuevo periodo de Gobierno estará marcado por las dificultades, de las que culpó a Estados Unidos por sus sanciones económicas.

Maduro visitó la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, donde tomó juramento, y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), para exigir "lealtad" y "máxima eficiencia".

Para el inicio de su nuevo período, tras unas elecciones a su medida y con la más baja asistencia de la historia del país, Maduro marcó seis líneas de acción. La primera de ellas, dijo, es la "reconciliación", que tiene que ver con el diálogo con sus opositores y las medidas de beneficio para los presos políticos que, a juicio de su Gobierno, no hayan cometido crímenes graves.

Según la ONG Foro Penal, en Venezuela hay unos 373 presos políticos.

Le siguen líneas para la recuperación de la economía, "ética ciudadana", el "fortalecimiento de logros" de los planes sociales, la defensa de su régimen en el plano internacional y, finalmente, la profundización del socialismo que dice llevar adelante en el país.

Maduro dijo que el periodo que viene estará afectado por las sanciones de la Casa Blanca, que ponen cuesta arriba para Caracas la financiación de deuda, la inversión y "hacer las importaciones necesarias".

El también jefe del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) juró "promover la unión nacional, el encuentro y la reconciliación del pueblo de Venezuela" y ser "leal al legado histórico" de Simón Bolívar y Hugo Chávez, su padre político.

"No puedo aquí engañar a nadie, (las sanciones) nos van a crear graves dificultades, dolorosas dificultades que vamos a enfrentar paulatinamente y las vamos a superar y las vamos a derrotar", dijo el gobernante ante la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), un suprapoder sin presencia de opositores.

Washington ha prohibido a cualquier ciudadano, institución o empresa estadounidense adquirir deuda venezolana o activos y propiedades pertenecientes al Gobierno de Maduro, incluidas aquellas inversiones derivadas de su estatal petrolera (PDVSA).

Venezuela vive la peor crisis de su historia reciente: hiperinflación, escasez de comida y medicinas, y caída de la producción de crudo a su nivel más bajo en tres décadas: 1,5 millones de barriles diarios frente a 3,2 millones de 2008.

"Hace falta una rectificación profunda (...) No estamos haciendo las cosas bien", reconoció Maduro, según citó la AFP.

La crisis económica del país se agravó durante el primer mandato de Maduro por las erráticas políticas de su Gobierno, acusado de corrupción.

En el mismo acto, Maduro aseguró que fueron capturados varios "conspiradores" relacionados con la Embajada de Estados Unidos en el país sudamericano y con el Gobierno de Colombia. Dijo que están "convictos y confesos todos los responsables de haberse vendido y haberse entregado a los traidores".

La ONG Foro Penal había informado de la captura de al menos 15 militares en los últimos días.

En otro discurso, durante una parada militar a propósito de su "reelección", ordenó al alto mando militar que toda la Fuerza Armada firme un documento de "lealtad" para iniciar un proceso de "remoralización".

La FANB es "chavista" y "bolivariana", por tanto, "no se acepta aquí ningún vestigio de colonialismo o neocolonialismo, es una Fuerza Armada antiimperialista", dijo.

La Fuerza Armada, considerada el principal sostén de Maduro, ha adquirido enorme poder político y económico durante su Gobierno, controlando sectores estratégicos como alimentación y petróleo.

"Exijo máxima lealtad a la FANB, máxima lealtad a la Constitución", enfatizó Maduro.

Acusó además a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, de tener "planes macabros" para dejar a su sucesor "una situación comprometida" y de "enfrentamiento bélico entre Venezuela y Colombia en la frontera".

"Yo le hago un llamado a las Fuerzas Armadas colombianas (a) no prestarse a ninguna provocación", dijo, y pidió al cuerpo castrense venezolano estar desplegado con "máxima inteligencia", prevención y capacidad para la "defensa del país".

Asimismo, pidió a su ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, avisarle a su par colombiano "de todos estos planes".

"Sabemos más de lo que decimos y sabemos más de lo que ellos creen. Yo lo que quiero es paz con Colombia. Quiero paz, hermandad, prosperidad, amor con Colombia", afirmó.

Al igual que Estados Unidos, Colombia no reconoce como legítimas las elecciones del domingo, en las que no participó el grueso de la oposición venezolana, por considerar que no fue libres ni transparentes.

También han rechazado los comicios la Unión Europea y el Grupo de Lima (Canadá y 13 países de América Latina y el Caribe).

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