Los Domadores de Cuba arrasaron este viernes 5-0 con sus oponentes, los Gallos de Francia, en el cartel de vuelta de las semifinales de la VIII Serie Mundial de Boxeo (WSB), en la categoría C-1, celebrado en la Ciudad Deportiva de La Habana, reporta EFE.
Al imponerse por segunda vez a sus oponentes, los Domadores, del grupo A del certamen, se clasificaron para la final en la que discutirán la corona con un contrincante que se definirá este fin de semana.
La primera victoria para los Domadores de Cuba la aportó en la apertura del cartel el boxeador Damián Arce, oro nacional en la división de los 49 kilogramos, al ofrecer una pelea en la que demostró su potencia física frente a su rival el español Samuel Carmona, púgil bajo la franquicia de los Gallos.
Pese a los intercambios de golpes, el cubano demostró un buen nivel físico y una pegada efectiva que en el cuarto asalto colocó contra las cuerdas a su contrario, para cerrar con la decisión unánime de los jueces a su favor.
Francia, uno de los equipos más competitivos de esta edición de la WSB, presentó en el segundo duelo a Samuel Kistohurry, de 23 años, quien en principio tuvo un mayor alcance favorecido por su elevada estatura ante el doble campeón olímpico cubano Robeisy Ramírez.
Aunque el francés es actualmente el número uno del ránking de la WSB no pudo soportar la técnica impecable del cubano que dominó desde los primeros asaltos del combate de los 56 kilogramos.
En el asalto final y en los últimos tres minutos de la pelea, Ramírez y Kistohurry cruzaron una andanada de golpes, pero el cubano logró exhibir su depurado estilo y obtuvo el triunfo por puntos y amplia diferencia.
En la pelea de la división de los 64 kilogramos el campeón mundial cubano Andy Cruz, de 22 años, se enfrentó al púgil profesional Morgan N'Dong, con aval de 20 combates a su favor.
Pero desde el primer round el púgil de los Domadores exhibió su favoritismo y tomó la delantera con una excelente defensa para evitar a su oponente, mientras el público coreaba eufórico su nombre "!Andy, Andy!".
En los siguientes asaltos el cubano, campeón de los Juegos Panamericanos de Toronto, mantuvo una sostenida y cómoda ventaja y, con un contundente derechazo en el tercer asalto, lanzó sobre la lona al francés para cerrar de esa manera brillante el mejor duelo del cartel con el Coliseo en pie.
En el cuarto combate de la noche, de los 75 kilos, subió al cuadrilátero en representación de los Gallos franceses el boxeador refuerzo Martin Owuno y en la otra esquina lo enfrentó el titular olímpico y del orbe de los Domadores, Arlen López.
Owuno, otro boxeador profesional con 16 victorias y 14 derrotas, y López iniciaron el enfrentamiento con un ritmo diferente al de sus antecesores y se enredaron varias veces en el centro del ring.
Pero el peso mediano cubano no tardó en poner de rodillas a Owuno en el cuarto asalto y el integrante de los Gallos decidió abandonar la pelea.
Para completar, en el quinto combate de la división de los 91 kilogramos, el cubano Erislandy Savón selló la barrida de los Domadores al derrotar al francés Sylvain Luce.
El crucero Savón amplió la ventaja en el cuarto episodio y aunque ambos boxeadores empezaban a dar muestras de cansancio, finalmente el cubano pegó más fuerte y antes de terminar el quinto asalto venció por abandono del francés.
La presencia de tres boxeadores rentados en las filas galas había levantado expectativas para este duelo pactado, donde los púgiles de Domadores se reafirmaron como uno de los mejores equipos de las Series Mundiales del deporte de los puños.
En el tope de ida que celebraron ambos equipos el pasado viernes en París, los Domadores vencieron 3-2 a los Gallos.