Un cubano que asegura ser el padre de una recién nacida, cuya madre murió en el parto en un hospital de Miami (EEUU) el pasado 2 de marzo, ha reclamado la custodia del bebé que también se disputa una prima de la fallecida residente en Florida, en un caso que guarda similitudes con el del balsero Elián González, reporta EFE.
La cubana Yarisleidi Rodríguez había llegado al sur de Florida el pasado 6 de octubre, en los últimos meses de gestación, con la intención de dar a luz a su bebé en Estados Unidos, pero falleció durante el parto en el hospital Jackson Memorial de Miami, informaron este jueves medios locales.
Se da la circunstancia de que la cubana nunca facilitó al hospital el nombre del padre, por lo que, según la dirección del centro médico, estaba obligado a aceptar a su prima, Nairobis Pacheco, como la persona responsable de la tutela temporal de la niña, de acuerdo con un documento que recogió el canal Univision 23.
De hecho, un juez decidió que se otorgara la custodia temporal de la recién nacida a Pacheco. Pero, el cubano Yoelvis Gattorno, radicado en la Isla, asegura que es el padre del bebé y reclama su custodia.
Según Gattorno, Rodríguez llegó a Florida en octubre pasado y asegura que él es el padre de la niña, que se encuentra ingresada en cuidados intensivos.
"Lo que tiene esa bebé es a su padre, que soy yo, que está aquí y está dispuesto a darlo todo por estar con esa bebé (...) Ella (Rodríguez) me está prohibiendo tener a mi hija", dijo en una videoconferencia con el citado canal.
La prima, que solicitó la custodia de la bebé tras el fallecimiento de la madre, presentó una demanda por mala praxis contra el hospital Jackson Memorial.
Ahora, Gattorno busca ayuda legal para lograr la custodia del bebé. "Yo tengo derecho de tener a esa bebé, la quiero, la amo y el deseo de esa bebé va a ser estar con su padre sea allá o aquí. Y mi deseo y anhelo es estar con esa bebé", aseguró.
La situación presenta algunas similitudes con el caso del niño balsero Elián González que sobrevivió al naufragio en 1999 de una embarcación de emigrantes ilegales. Su madre, Elizabeth Brotons, y otras diez personas, murieron cuando intentaban alcanzar las costas de Florida.
El "balserito" fue rescatado del mar por dos pescadores estadounidenses y entregado en Miami a unos parientes en una custodia temporal.
La historia del niño cubano balsero de cinco años, conmocionó y tensó las relaciones gubernamentales entre EEUU y Cuba hace 18 años. La familia en Miami del menor y su padre en Cuba fueron objeto de una manipulación política y mediática en la que estuvo en medio el niño.
Fidel Castro usó el suceso de la muerte de Elizabeth Brotons en el mar que consigue salvar y dejar a flote a su hijo como plataforma para lanzar lo que el régimen llamó "batalla de ideas" para hacer política y reclamar el regreso del niño a la Isla.
El pequeño náufrago retornó a Cuba el 28 de junio de 2000, después de que la entonces fiscal general de EEUU, Janet Reno, ordenase efectuar la llamada "Operación Reunión".
Alguaciles federales del Servicio de Inmigración y Naturalización de EEUU sacaron a la fuerza a Elián González de la casa de sus familiares en Miami y lo entregaron ese mismo día a su padre, quien poco después regresó a Cuba con su hijo.
Elián González actualmente es uno de los voceros del régimen.