Elián González cree que si se hubiese quedado en Estados Unidos con sus familiares hoy sería "una imagen insignia de ese grupo de cubanos en Miami que trata de destruir la Revolución, de hacer ver mal a Cuba".
"Tal vez sería un actor de televisión o tal vez tuviese más dinero del que tengo aquí y más comodidades, pero no tuviese a mi familia, no tuviese a mis amigos, no tuviese la tranquilidad que tengo aquí en Cuba", dijo en declaraciones al periodista de CNN Patrick Oppmann.
Elián fue sacado ilegalmente de Cuba por su madre, Elizabeth Brotons, en noviembre de 1999, cuando tenía siete años de edad. Durante la travesía por el Estrecho de la Florida, el bote en el que viajaban naufragó y la mujer y otras diez personas murieron.
El niño fue rescatado por pescadores que lo entregaron a las autoridades estadounidenses y, estas, a sus familiares en Miami.
El episodio desató un enfrentamiento entre el padre del niño, Juan Miguel González, respaldado por el Gobierno cubano —que organizó una gran campaña para exigir el regreso del menor a la Isla—, y la familia en Miami, apoyada por parte del exilio.
Tras su vuelta a Cuba, Elián fue convertido en instrumento de la propaganda del régimen. Participaba con regularidad en los actos políticos y con frecuencia se le veía junto a Fidel Castro.
Oppmann preguntó a González, que hoy tiene 23 años y es ingeniero industrial, qué piensa de quienes opinan que las autoridades cubanas le "lavaron el cerebro".
"Si me lo lavaron estaría diciendo que no me lo lavaron porque lo tengo lavado, pero es algo que no sucedió, es algo que mi papá no hubiese permitido tampoco", respondió.
A su juicio, la prueba de que las autoridades cubanas no influyeron en su manera de pensar es el apoyo que tuvo del fallecido Fidel Castro.
"Yo creo que la mejor forma de demostrar que no se me lavó el cerebro o que nadie influenció en mis decisiones es Fidel, porque puso en mis manos muchas cosas; si yo quería ser deportista, me apoyaba en eso (…), si quería desarrollarme en el arte y ser pintor, lo apoyaba", dijo.
Interrogado sobre qué pasará después del "proceso electoral" en el que Raúl Castro ha prometido dejar el poder, Elián González dijo que "Cuba es mucho más que su Gobierno".
"Como muchos dicen, termina el mandato de los Castro, pero creo que no va a terminar ni la ideología, ni lo que nos han enseñado, ni las ideas de los Castro; no van a terminar con que termine un mandato", afirmó.
El llamado "niño balsero" envió un mensaje conciliador a su familia en Miami. Lo mismo hizo su padre.
"Las mejores intenciones tengo de perdonarlos, de que pueda seguir una relación como la hubo siempre de parte de las dos familias, ellos con sus ideales y nosotros con los nuestros", dijo Juan Miguel González
Elián opinó que su caso "le demostró tanto a los familiares de Cuba como a los familiares de Estados Unidos que no tenemos que mezclar la política ni el dinero en la familia, que más allá de nuestra ideología, de los que sintamos, de nuestros principios, está la familia, no tenemos por qué estar separados".
"Nos hemos separado por leyes, por el bloqueo, por mar, no tenemos que seguir separándonos como familia", dijo.
Reconoció que "en ocasiones" piensa en Estados Unidos.
"Mis dos pies, mi cuerpo y mi mente están en Cuba, pero (…) no sería lo que soy si no hubiese estado en Estados Unidos".
En una entrevista en 2015 con ABC News Elián dijo que si pudiera ir a cualquier lugar del mundo elegiría "a Estados Unidos".
"Quiero tener el tiempo de darle mi amor al pueblo estadounidense", afirmó entonces.