Back to top
Sociedad

¿Dólar vs. euro?

La caída del valor de la divisa europea se nota en muchos bolsillos de la Isla debido a las remesas.

La Habana

La caída del Euro (EUR) con respecto al cambio en Pesos Cubanos Convertibles (CUC) ha desatado entre la población no pocas inquietudes. Para los cubanos que vivimos obligados a reinventar la economía, día a día y centavo por centavo, cualquier movimiento en la cotización, emitido por las Casas de Cambios (CADECA), marca la diferencia.

En diciembre del pasado año, abruptamente, el euro experimentó un descenso aproximado a los diez puntos de su valor frente al CUC, con una incidencia que terminó afectando la economía doméstica. De 1.25 CUC por cada EUR, que había sido el promedio de los cambios en meses anteriores, descendería hasta la cifra de 1.14.

"Algunos de mis planes que tenía para noche buena y fin de año se me vinieron abajo con el 'resbalón' del euro". El comentario de Celia Lugo, veterinaria jubilada, es casi un lamento. "Mi hijo que vive en Alemania todos los años me envía 200 o 300 euros a finales de noviembre, según como esté la cosa. Como siempre, yo saco mis cuentas y me planifico con respecto al cambio en CADECA. El euro, recuerdo, oscilaba sobre los 1.25; y podrá parecer una tontería, pero esos 25 CUC, en un hogar cubano, representan muchísimo. El que no quiera creerlo, o no vive en Cuba o es millonario".

'En este país, para mucha gente, un CUC puede significar comer o no'

Miembro del Grupo Nueva Banca, S.A., la CADECA fue creada mediante Escritura de Constitución de Sociedad Anónima No. 1499, de 14 de junio de 1994. Entre sus operaciones autorizadas incluye la compra-venta de CUC por USD y EUR —y de otras monedas extranjeras—, cambio de cheques de viajero, y la tramitación de depósitos para acreditar en cuentas bancarias. La cotización de los cambios, diariamente, es emitida por el Banco Central de Cuba.

Entender que el salario promedio en el país, según las estadísticas oficiales del Gobierno, es aproximado a los 18.84 CUC es una pista a considerar el por qué los cubanos vivimos pendientes a las fluctuaciones de los cambios de moneda. Es un hecho que se dispara por el crecimiento en los índices de ciudadanos que optan por la residencia en el exterior y el aumento, por ende, de las remesas familiares.

"Recuerdo la época dorada del euro en Cuba", añora medio risueño Alfonso Cañizares, tornero y ex miembro de la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (ANIR). "Mi hermano y su familia, que residen desde el 99 en España, nos mandaban la 'mesada salvavidas' en dólares americanos, que en aquellos tiempos todavía circulaban aquí. Cuando inventaron el euro y me llegó el primer envío con esa moneda me dije: 'y esto qué carajo es', pues yo ni me había fijado en los carteles de los bancos ni en las noticias de la televisión. Cuando llegué a la CADECA y vi que se cambiaba a 1.51 por poquito hago una fiesta. Oye, que eran 51 CUC más. Después fue bajando, y estuvo un tiempito entre 1.40 y 1.38. Pero desde hace más de tres años fue bajando mucho más, incluso hasta 1.21 y 1.20".

Aunque el dólar continúa representando la moneda más segura a largo plazo, y es garante ante cualquier cambio brusco y sin previo aviso del Gobierno, para la vida diaria el euro —solo superado por la Libra Esterlina (GBP), cotizada históricamente sobre los 1.50— se alza como favorito, en tanto implica agregar unos CUC de más al siempre reñido bolsillo ciudadano, pues el cambio en dólares nunca sobrepasa el 1.02.

Como es lógico, los sucesos acontecidos a partir del pasado 17 de diciembre y el impacto que las futuras decisiones en los diálogos entre Estados Unidos y Cuba puedan representar para la economía de la Isla, cualquier destello relacionado al tema se convierte de inmediato en criterios y especulaciones.

"Es muy curioso que el bajón del euro haya sido en diciembre", aventura Vicente Leyva, graduado de ciencias informáticas y vendedor de bisutería en la feria de la Avenida del Puerto. "Mi jevita es francesa y si dios quiere nos vamos a casar en agosto. Ella me envía euros todos los meses para los trámites y para sobrevivir mientras tanto, porque ya la feria no da para más por los impuestos. En la última transferencia que me llegó de noviembre, el euro estaba a 1.24. Durante todo el año pasado estuvo por ahí, entre 1.26 y 1.23. Cuando fui a retirar la remesa de diciembre, el día 20, había bajado a 1.14. Yo no me creo la justificación de que Europa está en crisis, y que ello ha provocado esta depresión de casi diez puntos. Es cierto que el euro ha ido descendiendo desde hace unos años, pero siempre paulatinamente. Lo de diciembre fue de pronto, casi de un día para otro. Creo que tiene que ver con los nuevos rumbos que se figuran a partir de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos".

"A mí, para ser honesto, no me afecta tanto; pero si he visto a personas, ancianos en su mayoría, que les afecta muchísimo que el euro vaya en picada"; agrega en tono pesimista Jesús Chirino, operario de una empresa farmacéutica. "En este país, para mucha gente, un CUC puede significar comer o no. Es duro pero es así. Me alegra de verdad que de una vez y para siempre se restablezcan las relaciones con los yumas. Pero si eso implica que el euro baje me resulta en muy poco beneficio para el pueblo. La cotización del dólar americano sigue igual; entonces, en lo que el palo va y viene, los cubanos de a pie seguimos afectados. En fin mi hermano, pase lo que pase, para nosotros, los del día a día, la cosa va de mal en peor".

Ciertamente el inicio de las conversaciones entre senadores y representantes del congreso de Estados Unidos y funcionarios del Gobierno cubano despierta el beneplácito del pueblo. Religiosos y ateos se unen en oraciones y ruegos porque tales acontecimientos no finalicen como agua entre las manos.

Hay que entender tanto a optimistas como a pesimistas, porque ambos bandos han sufrido lo mismo en más de cincuenta años bajo un Gobierno que ha dado más tristezas que sonrisas. Pero también hay que entender a quienes, con justificado enojo, contemplan como el euro "se precipita cuesta abajo" y con él unos centavos extras que "ayudan a respirar"; como confiesa un custodio de la CADECA ubicada en la Terminal de Ómnibus Nacionales.

"Desde que tengo uso de razón —dice con jocosidad—, nunca había visto al euro tan desprestigiado. El lunes 19 llegó a su cifra histórica más baja: 1.11. Aunque parece que alguien, no sé si dios o el Gobierno, ha escuchado las quejas porque hoy 21 amaneció en 1.15".

¿Las conversaciones entre Washington y La Habana podrían iniciar una disputa entre el dólar y el euro? Eso está por verse. De momento al CUC no le quedará más remedio que servir de árbitro y esperar por la decisión de los jueces.

Archivado en

Sin comentarios

Necesita crear una cuenta de usuario o iniciar sesión para comentar.